El huracán Laura, ha dejado muerte y devastación en su paso por la zona del Caribe, dejando como saldo 21 muertos en Haití y otros cuatro fallecidos en Republica Dominicada, presentando ahora una seria amenaza en el estado de Luisiana y al este de Texas, pues genera en las costas marejadas ciclónicas de hasta 6 metros, vientos extremos e inundaciones repentinas a lo largo de esta noche y durante la mañana tocando tierra cerca de Cameron, en Louisiana, como un huracán categoría 4, según informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.
Laura tocó tierra presentando vientos máximos sostenidos de 240 kilómetros por hora. Estaba ubicado 45 kilómetros al sur-suroeste de Lake Charles y avanzaba en dirección norte a una velocidad de 24 kilómetros por hora.
Momentos antes de que el huracán tocara tierra, el organismo llamó a los ciudadanos resguardarse, “trate estos vientos extremos como si se acercara un tornado. Muévase inmediatamente a una habitación segura en su refugio. ¡Actúe ahora para proteger su vida!”.
En ese sentido las autoridades ordenaron desde el martes la evacuación de la zona de Lake Charles, donde viven unas 200 mil personas, mientras que el director del centro, Ken Graham, se dirigió en un vídeo a los residentes de la zona: “Es demasiado peligroso estar ahí afuera, espero que no estén allí, espero que hayan evacuado”.
Los meteorólogos del NHC pronostican, sin embargo, un “rápido debilitamiento” de la tormenta ahora que Laura ha tocado tierra.
En su trayectoria pronosticada, Laura se moverá tierra adentro a través de Louisiana y llegará a Arkansas, la próxima noche para desplazarse el viernes sobre el valle central de Mississippi debilitado a depresión tropical.
Con su categoría 4, Laura es la tormenta más potente hasta la fecha de la temporada de huracanes en el Atlántico.
Los otros huracanes han sido Hanna, Isaías y Marco, los tres de categoría 1.