Aguililla, Mich.- La tensa situación que se vive en el municipio de Aguililla, derivada de la crisis por inseguridad, fue causal de la confrontación que tuvieron este día pobladores de la zona y el gobernador de Michoacán Silvano Aureoles.
La tarde de este martes, el mandatario estatal acudió a la región donde grupos delictivos han protagonizado hechos violentos y se suscitó un hecho que sacudió las redes sociales.
Resulta que Aureoles Conejo viajaba en una patrulla de militares por las calles de Agulilla, cuando una persona (se desconoce su identidad y oficio) gritaba consignas hacia el gobernador, mostrando letreros en una cartulina de la cual se desconoce también el contenido del mensaje.
En determinado momento, Aureoles Conejo descendió de la unidad y caminando lentamente se acercó hasta el sujeto y con una mano lo empujó en el pecho para luego retirarse.
Al respecto, Silvano Aureoles justificó la acción con un mensaje en su página de Facebook que textualmente dice:
Todo el mundo sabe lo que está pasando en Aguililla: violencia, una situación casi de guerra y bloqueos de carreteras que no permiten el paso de productos de primera necesidad, incluso de enfermos de gravedad que no pueden ser trasladados a un hospital.
Ante esa situación, cualquier otro gobernador se hubiese quedado en Morelia, pero, a pesar de que me aconsejaban no ir, decidí dar la cara porque no voy a permitir que cientos de familias vivan amenazadas cada vez que los grupos deciden agarrarse a balazos.
En medio de esa situación, nos encontramos una manifestación de halconeros que insultaban y agredían a la Guardia Nacional, al Ejército, a la Marina y a un servidor y yo decidí encarar a uno de los provocadores.
En Michoacán saben que yo los defiendo y vamos a seguir peleando por el respeto a la ley y a las instituciones. He recorrido un sinfín de veces mi estado y lo voy a seguir haciendo como cualquier otro ciudadano de Michoacán; no me voy a quedar ni callado ni cruzado de brazos ante quienes quieren seguir sembrando la violencia y el caos, burlándose de la autoridad y de la ley.
Voy a recuperar Aguililla de las manos de los delincuentes.