Cd. del Vaticano.- En el marco del inicio de las festividades por la semana santa, el Papa Francisco, ofició la misa del domingo de ramos en la basílica de San Pedro que por primera vez en mucho tiempo se encontraba desierta debido a la pandemia de coronavirus que azota al planeta.
Su Santidad Francisco, bendijo esta mañana los ramos en medio de una basílica vacía a excepción de un minúsculo grupo de religiosas y religiosos sentados uno por banco al interior de este templo, en una ceremonia difundida a través del sitio web del Vaticano, como se realizará también el próximo domingo para la misa de Pascua, la celebración más importante del cristianismo.
En su homilía el Papa Francisco dijo que: «Hoy, en el drama de la pandemia, ante tantas certezas que se desmoronan, frente a tantas expectativas traicionadas, con el sentimiento de abandono que nos oprime el corazón, Jesús, nos dice a cada uno: ‘Ánimo, abre el corazón a mi amor. Sentirás el consuelo de Dios, que te sostiene'».
Por otro lado en este mensaje también se dirigió a los jóvenes del mundo mencionando el esfuerzo de quienes pese al riesgo de contagio salen a la calle para ayudar a otros, llamando a la población de todos los países a: «Mirad a los verdaderos héroes que salen a la luz en estos días. No son lo que tienen fama, dinero y éxito, sino son los que se dan a sí mismos para servir a los demás. Sentíos llamados a jugaros la vida. No tengáis miedo de gastarla por Dios y los demás. ¡La ganareís!
Es necesario recordar que el 15 de marzo, el Vaticano anunció que todas las celebraciones litúrgicas de pascua se llevarían a cabo sin la presencia de fieles en los templos, por lo que tanto la plaza como la basílica de San Pedro acataron a esta disposición.