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Raquítico, el presupuesto destinado en Michoacán a la salud mental

Morelia, Mich.- El presupuesto destinado por el gobierno que encabeza Alfredo Ramírez Bedolla para la salud mental de los michoacanos es insuficiente y apenas alcanzaría para la atención de 18 mil personas.
Esto, según las estimaciones de la Asociación Mexicana de Psicología y Desarrollo Comunitario que considera que la estrategia de atención a la salud mental en Michoacán, sin presupuesto y sin trascendencia.

La mencionada asociación, a través de un comunicado, informó que recientemente el Secretario de Salud Elías Ibarra Torres, anunció que ejercerá en el año 2022 la cantidad de 90 millones de pesos para la atención a la salud mental y las adicciones.

No obstante -asegura- dicho presupuesto únicamente alcanzaría para la atención de 18 mil personas a nivel estatal; tan sólo en un día se acabaría dicho presupuesto.


Este anuncio además, contraviene lo dispuesto en la Ley de Salud Mental del estado de Michoacán de 2014, que establece la obligatoriedad de invertir por lo menos 250 millones de pesos en atención a la población vulnerable cada año, por lo que viola el principio de progresividad.

Entendemos que el principio de progresividad de derechos humanos implica el gradual avance para lograr su pleno cumplimiento, es decir, que para el cumplimiento de ciertos derechos se requiera la toma de medidas a corto, mediano y largo plazo, pero procediendo lo más expedita y eficazmente posible.

De acuerdo con especialistas en administración nosocomial, el costo día-paciente en hospital, representa una erogación de 5 mil pesos; esto es, las instituciones de salud gastan dicha cantidad diaria, por cada uno de los internos en hospitales.

Es así que el presupuesto anunciado, alcanzaría únicamente para 53 días de atención, dejando en desabasto por más de 300 días al año a la población.

Cabe mencionar que México se sitúa en los últimos lugares entre los países adheridos a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en cuanto al gasto total en salud, ya que, de acuerdo con informes de dicho organismo internacional, el 43 por ciento de dicho gasto sale del bolsillo familiar.

Ello pone de manifiesto las deficiencias en la atención a la salud mental que ofrecen las instituciones públicas, en especial la Secretaria de Salud del Gobierno del Estado, y que diariamente padecen las y los ciudadanos.