La Piedad, Mich.- “La vida de mi padre corre grave peligro. No es la primera vez en ser atacado por delincuentes que quieren apoderarse del poco dinero que tiene”.
Así lo denunciaron los hermanos Saúl y Lucía Quevedo, hijos del hombre que el viernes pasado fue víctima de un ladrón que lo roció con líquido inflamable y luego le encendió fuego.
Daniel Quevedo Pimentel, de 72 años de edad, se encuentra internado en el Hospital Regional de La Piedad tras haber sufrido quemaduras de segundo y tercer grado. Las lesiones le han afectado sus cuerdas bucales.
No tiene familiares en La Piedad. Solamente cuenta con sus dos hijos que viven en Estados Unidos, en el estado de Illinois.
El pasado viernes, poco después de las tres de la tarde, un sujeto ingresó a su domicilio, situado en la calle Luna de la colonia Tres Estrellas. Ahí le exigió que le entregara el dinero de su pensión y luego derramó líquido inflamable sobre su cuerpo y le prendió fuego.
Vecinos vieron al delincuente entrar y salir varias veces del domicilio, llevándose las pocas pertenencias de Daniel. Fue entonces que llamaron a la policía.
Al llegar, los uniformados encontraron a la victima con graves quemaduras, por lo que fue trasladado al Hospital Regional en una ambulancia de Protección Civil.
Saúl y Lucía fueron notificados de lo que ocurrió con su padre y también se enteraron que esta no es la primera vez en que los malvivientes de la colonia le roban sus pertenencias.
YA HABÍA SIDO AGREDIDO
“Ya hace dos años otra persona intentó hacerle daño, también para quitarle su dinero. En aquel tiempo hablamos con la policía, pero solo dijeron que iban a reforzar la vigilancia.
«Sabemos, por que nos han dicho los vecinos, que en ese barrio hay mucho delincuente que extorsiona a las personas mayores. Mi padre ha sido victima constante de eso”, relataron Saul y Lucía en una entrevista telefónica con La Redacción.
Los hermanos buscan que el gobierno de los Estados Unidos le brinde asilo político a su padre. Consideran que su vida corre un grave peligro.
Actualmente el estado de salud del septuagenario es estable, pero temen que una vez que regrese a su domicilio pueda ser victima nuevamente de la delincuencia. Por eso pretenden llevarlo a vivir a los Estados Unidos, donde ellos puedan asistirlo. Sin embargo, las leyes migratorias no lo permiten.
EL AGRESOR ESTÁ DETENIDO
Saúl y Lucía saben que la persona que agredió a su padre fue detenido por la Policía Municipal.
«Ya le tomaron la declaración a mi papá y falta ver que dicen las autoridades», relató Lucía.
Se tiene conocimiento que el detenido es un sujeto que en otras ocasiones ya ha sido acusado de robo.