La Piedad, Mich.- La región de La Piedad actualmente está siendo azotada por plagas de moscos de dos especies: el Culex, que crece en las aguas estancadas del río Lerma y el Aedes Aegipty, que se desarrolla en patios, cocheras y jardines de las casas.
Los ciudadanos emplean diversos tipos de mecanismos para alejarlos y evitar las molestas picaduras, muchas veces sin conseguirlo.
Las «plaquitas» repelentes son una de las herramientas más utilizadas por los piedadenses para evitar que los mosquitos entren a las habitaciones.
Pero es necesario tener precaución con este producto, pues la Secretaría de Salud de Michoacán reconoció que las intoxicaciones por plaquitas repelentes son más comunes de lo que parece.
Y es que, algunas personas las colocan y las mantienen encendidas toda la noche en lugares cerrados y sin ventilación. «De ahí la importancia de no dormir con ellas encendidas o conectadas a la corriente eléctrica», indicó.
Las sustancias que se usan en estas plaquitas para mosquitos suelen contener reactivos llamados piretroides, considerados los más comunes en intoxicaciones por plaguicidas.
Los piretroides, cuando se usan de manera prolongada, pueden causar enfermedades como el cáncer o leucemia.
Por eso, es indispensable leer instrucciones de uso antes de abrir el empaque.
Para utilizarlo de manera correcta, sigue estas indicaciones:
- Retirar la envoltura de la pastilla.
- Introducir la pastilla en la unidad con el logo hacia afuera.
- Conectar la unidad en una posición horizontal.
- Cuando la pastilla se decolore (después de 10 horas), desconectar y remover la pastilla.
- Guardar el producto en un lugar seguro, seco y lejos de temperaturas extremas y alimentos.
- Debe ser usado en áreas ventiladas.
- No usar en presencia de personas asmáticas o alérgicas respiratorias.
- Lavarse las manos con agua y jabón después de usar el producto.
- Mantenerse a una distancia mínima de 2 metros.
- Mantener alejado de los niños y las mascotas