El científico estadounidense indicó que es un grupo formado por expertos, entre ellos Karikó, para llegar a un gran conjunto de personas que “todavía creen en la ciencia”, pero que no están seguras y oyen a “esta gente loca diciendo locuras sobre las vacunas”.
“Creo que a esas personas les ayudará”, dio Weissman en una breve y tradicional entrevista con él en la página web de los Premios Nobel tras el anuncio del galardón.
El nuevo Nobel de Medicina, Drew Weissman, dijo también que, junto a otros expertos, ha creado un grupo para combatir las dudas sobre las vacunas y la desinformación, porque, “por muy importante que sea la vacuna, si no te la pones no funciona”.
Aunque él no es de los trabajan pensando en los premios, admitió que el Nobel “es el máximo reconocimiento al trabajo, así que es una experiencia maravillosa”.
Los nuevos Nobel han formado equipo durante 20 años, “antes de que nadie supiera lo que es el ARN, o le importara”, y recordó que allí estaban los dos, “literalmente uno al lado del otro en un banco, trabajando juntos. Hablando y discutiendo nuevos datos”.
Además ha referido que, como ambos tienen dificultades para dormir, no era de extrañar que “a eso de las tres o las cinco de la mañana” se enviaran correos electrónicos con nuevas ideas. “Siempre era estimulante, siempre estábamos hablando de ciencia”.
Desde la llegada de las vacunas de ARNm contra la covid-19, Karikó y Weissman han recibido multitud de reconocimientos antes del Nobel y viajan por todo el mundo atendiendo conferencias y otros compromisos.