La Piedad, Michoacán.- Empresarios del ramo textil, dedicados a la elaboración de prendas deportivas en La Piedad, se han visto muy afectados por la contingencia sanitaria que se vive actualmente, debido a que desde el mes de marzo tubieron que detener su producción lo que les ha dejado sin ganancias y con material almacenado.
A esto se ha sumado que contaban con algunos pedidos que debieron ser cancelados, lo que se traduce en dinero que no se puede recuperar, teniendo que incrementar deudas que se van acumulando y los recusos no llegan.
Esta sitaución se vive en prácticamente todas las empresas de este ramo que se dicen ajenos a cualquier programa de apoyo económico gubernamental que no llega a sus negocios, sin embargo, algunos de los fabricantes, si han cumplido con la recomendación de apoyar a sus empleados, para que no se queden sin ingresos, pero la situación se ha vuelto insostenible.
Con esta pandemia se ha despertado la imaginación de los fabricantes quienes paso a paso, han ido cambiando su giro para pasar de los deportivo a lo que la ciudadanía necesita, como el caso de la fabricación de cubrebocas reutilizables, en los que consiguieron colocar pedidos importantes que les permitió alcanzar recursos para sobrevivir las primeras quincenas.
Ahora se están analizando las necesidades de la ciudadanía de manera que se pueda atender a sus demandas ofreciendo productos que la población pueda adquirir de manera que se continúen las labores en los talleres de corte y costura, aun que saben que el mercado fuerte para los empresarios se encuentra en los Estados Unidos y mientras el vecino país del norte no recupere sus actividades, el trabajo de este lado del río Bravo seguirá detenido.
Por otro lado, temen que este periodo de confinamiento en que sus maquinas están detenidas y los trabajadores se encuentran sin laborar, deban contratar a nuevo personal lo que se traduce en tiempo e insumos concierta pérdida, debido a que hay que iniciar con capacitación a los empleados de reciente ingreso.
Situación similar se vive para quienes fabrican balones de fútbol o calzado deportivo, que también tuvieron que suspender sus labores o trabajar al mínimo de capacidad.