Inicio Destacados LO QUE DICEN LAS MALAS LENGUAS

LO QUE DICEN LAS MALAS LENGUAS

Dicen las Malas Lenguas que estamos a unos cuantos días de un acontecimiento histórico en La Piedad. Y es que, independientemente de por quién hayamos votado, nunca se había registrado la reelección de un alcalde y ahora Samuel Hidalgo logró reconquistar la simpatía de los ciudadanos, por lo que será presidente municipal por segunda ocasión (esto ya lo habían logrado Luis Trillo Meza y José Luis Fernández Alba). Pero ser reelecto en el periodo consecutivo, eso no había ocurrido.

Y esta podría ser la última vez que suceda, ya que el poder legislativo mexicano está preparando desde hace tiempo las reformas electorales para acabar con las reelecciones locales. Y ahora, la presidenta electa Claudia Sheinbaum se ha fijado ese propósito.


El caso es que Samuel Hidalgo será alcalde por otros tres años. Pero ¿Su gente también estará gobernando? ¿Eso de la continuidad incluye el empoderamiento de los directores, jefes de área, coordinadores, secretarias y asalariados que están ahorita?

¡Dios quiera que no!

 

Dicen las Malas Lenguas que en el gobierno municipal de La Piedad se ufanan de haber realizado un excelente trabajo durante estos tres años. Hay logros importantes, como la implementación de nuevos programas sociales (baño digno, zapatos escolares),  la creación de la Policía de Género, el apoyo a las corporaciones de emergencia, la red municipal de salud y se regresó a la cercanía con la gente.

Sin embargo, también hubo proyectos que pudieron haber detonado, pero se quedaron a medias por flojera de algunos funcionarios; un ejemplo es la plazoleta de El Salto en donde se invirtió una buena cantidad de recursos para su remodelación, pero hizo falta el acompañamiento de un proyecto turístico (promoción del sitio, actividades culturales, artísticas, suvenires, etc), al grado que ni siquiera fueron capaces de colocar un letrero en la carretera para ubicar a los visitantes o darles la bienvenida.

El Centro de Atención Animal fue un proyecto que arrancó bastante bien, pero ha venido a menos debido a la falta de recursos económicos. Argumentan que no hay manera de asignarle dinero al programa por algunas trabas legales, pero ninguno de los 12 regidores que integran el cabildo tuvo el tiempo, las ganas y la disposición para plantear una solución o gestionar lo necesario.

Tal vez lo anterior no tenga tanta repercusión como el hecho de haber eliminado, desde el inicio de la administración, a la coordinación de Ecología, ya que hoy, precisamente estamos pagando las consecuencias de esa mala decisión.

Tenga usted por seguro que una buena parte de las inundaciones que hemos tenido en el pueblo se habrían evitado. Es cierto que ha caído mucha agua y que existe también un crecimiento anárquico de la ciudad, pero no hubo nadie que se hiciera cargo de cuidar el medio ambiente con programas para evitar la basura en las calles (cada vez que llueve, los desechos tapan los espacios por donde corre el agua y provocan que se inunde el Infonavit Miguel Silva). Tampoco hubo nadie que evitara la deforestación en nuestras zonas cerriles (el agua desciende como tobogán desde el Cerro Grande y el Ejido Los Moreno) y mucho menos que emprendiera una campaña para plantar nuevos árboles.

La proliferación de las siete plagas nocivas que habitan entre nosotros (dos especies de moscos, dos especies de cucarachas, dos especies de moscas, ratas y ratones, chinches de cama, perros callejeros y alacranes) se pudieron haber controlado con un trabajo adecuado desde una Dirección de Ecología. La basura en las calles fue un problema que sobrepasó con mucho a la Dirección de Servicios Públicos. Si a esto se le agrega que nunca existió una coordinación con la Jurisdicción Sanitaria que también se hace como que la virgen la habla, pues tenemos los resultados que ya todos conocemos.

 

Dicen las Malas Lenguas que ahora que hablamos de la Jurisdicción Sanitaria tenemos que mencionar que se traen un verdadero desmadre con el asunto de la fusión del IMSS-Bienestar. Los pacientes se dan cuenta de ello: cuando uno llega a la sala de urgencias del Hospital Regional se encuentra con médicos con los pies arriba del escritorio que difícilmente voltean a ver el enfermo o herido y al final lo mandan a la calle a buscar medicamentos y material de curación que se supone que ahí debería existir.

Si uno llega a urgencias del IMSS puede tardar mucho tiempo (hasta medio dia) en el área de triage sin recibir atención y ya cuando lo ingresan el trato es distinto, un poco más humano sí, pero muchas veces no hay una camilla o silla de ruedas para colocar al enfermo.

Y si los médicos del Regional no quieren trabajar le mandan los pacientes al IMSS y cuando ahí llegan le dicen que no es derechohabiente y va pa atrás.

Por si fuera poco, en la Jurisdicción Sanitaria tienen años sin realizar supervisiones a los centros expendedores de alimentos: nadie revisa que la calidad del agua, la carne, frutas o vegetales que se expende en La Piedad tenga los mínimos estándares de higiene aptos para el consumo humano.

Resulta curioso cuando sale el doctor Roberto Carlos Ibarra a decir “tenemos abasto al 100 por ciento de medicamentos y todas las vacunas disponibles”, pero en el Centro de Salud tienen otros datos.

La neta yo nunca he ido a Dinamarca, pero desde aquí los compadezco porque seguramente allá están peor que nosotros.

 

Dicen las Malas Lenguas que todo lo que ha venido pasando después de la pandemia ha traído repercusiones de las que muchos parece que no nos damos cuenta. No hablo de lo que pasó en esos dos años, sino de lo que ocurre actualmente con el desarrollo anárquico y desordenado de las ciudades.

Cada vez tenemos mayores peligros: aumento en los índices de violencia intrafamiliar, incremento notable de suicidios en jóvenes, venta indiscriminada de alcohol y sustancias tóxicas. Por lo que dependencias como el Instituto de la Juventud ya no pueden andar jugando a inventar capsulas del tiempo que ya existían. El Instituto de la Mujer ya no debe dedicar su tiempo a festejos y buscar nuevos términos para definir cosas que ya existen como la palabra violencia.

Existe un área a la que casi nadie cuestiona y es donde se tejen los asuntos más escabrosos del pueblo y esa es Urbanismo. Ahí se otorgan sí o sí permisos para todo: Construir un OXXO que vende bebidas embriagantes y tabaco frente a una escuela o un hospital (el reglamento señala que deben ser 100 metros), modificar las áreas de donación en más casas para su venta, construir al margen de un arroyo o canal. Y hasta el agandalle de predios intestados.

Todas estas situaciones pasan en la actualidad y si los ciudadanos no abrimos los ojos ante lo que hace o deje de hacer el gobierno sea del color que sea, en unos años más no vamos a estar como Venezuela, ¡simplemente no vamos a estar!

 

Dicen las Malas Lenguas que entre los pasillos de la presidencia se escuchan cada vez más fuerte versiones de quién de los directores se va y quienes se quedan.

Se sabe que César Oceguera será el Secretario del Ayuntamiento (otra vez); Juan Carlos Chávez Rojo será el Oficial Mayor (otra vez); Rigoberto Ortiz será el Tesorero (ooootra vez); Ramón Romero será director de Servicios Públicos (ootra vez), pero ya no estará a cargo de la recolección de basura, para eso se creará la coordinación de limpia y para el cargo ya se tiene apalabrada a una persona proveniente de Aguascalientes. En el DIF estará Brenda Orozco (otra vez), en el Predial, Rafael Herrera (oootra vez), también Rigoberto Romero continúa en Vinculación Internacional.

Aunque algunos de estos funcionarios no entran en funciones el próximo lunes, ya que para el caso del Tesorero, Secretario del Ayuntamiento, Dirección del DIF, Instituto de la Mujer, Instituto d la Juventud y Contraloría se tiene que montar un pequeño teatro en el que se plantea una terna que pasa por el cabildo y los regidores votan si la aprueban o no. Hasta ahora, no ha existido caso en el que se rechace la propuesta planteada por el alcalde, pero puede llegar a suceder.

En las dependencias donde habrá cambios será en Promoción Económica, la cual estará a cargo de Noel Eduardo Rincón; en la dirección de Mercados estará el actual regidor Mario Cárdenas Núñez.  También se vislumbran cambios en el INJUP con la llegada de Edgar Morales; Rodolfo Ramírez seguirá en el gobierno municipal, pero no precisamente el Comunicación Social.

Aunque muchos pensaban que Ricardo Hidalgo se quedaría a cargo de Desarrollo Social, en esa posición estará Joaquín del Ángel, que es la cuota que impuso César Oceguera. En Reglamentos ya no estará Ricardo Calderón, pues se irá a chambear (es un decir) al Congreso con Vanessa Caratachea. La dirección estará en manos de José Antonio Ibarra (imagínese usted).

En Seguridad Pública el director será Aldo Javier Alvarado (estaba anunciado desde hace tres años) y en Tránsito seguirá Mario Rosales.

 

Dicen las Malas Lenguas que no todos los grupos políticos que presumen tener peso en el Gobierno de La Piedad pudieron imponer gente en las direcciones, pues ya no continuarán en la administración Miriam Cardona, directora de Cultura ni Claudia Buenrostro, directora del Instituto de la Mujer (ambas emparentadas políticamente con Luis López). El PRI solo pudo imponer a Toñito Ibarra y el PRD no estaba en condiciones de pedir ni las buenas noches.

Ya en unas semanas más nos iremos dando cuenta de cómo se van generando las cosas al interior de un cabildo que, en el papel se advierte una oposición cerrada y difícil, aunque sin idea.

Ojalá que los que repiten en el cargo hagan se esfuercen al doble que en el periodo que está por concluir. Esta vez no habrá pretexto para hacer las cosas bien. Si el panismo no entiende esto, nunca volverá a tener una oportunidad.

Los ciudadanos ya no somos conejillos de indias.