El presidente del Comité de Bioética del Centro Médico «Puerta de Hierro-Andares» de Guadalajara, Jalisco, doctor José Carlos Cortés Sandoval, alertó a los pacientes sobre las cirugías innecesarias realizadas por algunos médicos cirujanos que «solo quieren meter metal (instrumental o material) para sacar metal (dinero)».
Durante la sesión ordinaria del mes de febrero de los especialistas en ortopedia y traumatología michoacanos, el maestro en ciencias, cirujano ortopedista y traumatólogo, con maestría en bioética por la Universidad de Guadalajara, abordó el tema «Cirugías innecesarias. La ética es un cálculo de conveniencia». Señaló que estas intervenciones representan un «flagelo que se arrastra en los pasillos de los hospitales y en los vestidores de los quirófanos» y urgó en la necesidad de visibilizarlo.
«Cuando converge la economía y la ética, los tomadores de decisión se decantan por lo conveniente y no por lo conducente», advirtió. Cortés Sandoval enfatizó que la atención humana define a los médicos, más allá de su competencia técnica o el tipo de institución donde laboran.
Explicó que una de las cirugías innecesarias es aquella que se practica por ignorancia, donde el médico, sin certeza de su eficacia, induce al paciente a firmar el consentimiento. Además, indicó que en el sector público los recursos deben maximizarse, mientras que en el privado deben optimizarse, siempre cuidando el bolsillo del paciente.
Señaló que los médicos que deliberadamente practican cirugías innecesarias en todas las especialidades recurren a la «simpatía» para convencer a los pacientes. «Todos los fraudes son exitosos porque hay un simpático cooperante», aseveró. Ejemplificó con la cesárea innecesaria y la operación de menisco como prácticas recurrentes, denunciando que «meten metal (prótesis) para sacar metal (dinero)».
Advirtió que esta práctica está penada y constituye un fraude. «Cuidado con esos doctores y con los hospitales que los apoyan en su objetivo de monetizar su práctica profesional». Llamó a los cirujanos a ser honestos y congruentes, pues las certificaciones y capacitaciones carecen de valor si no hay ética.
Sobre la capacidad del paciente para detectar una cirugía innecesaria, enfatizó que la formación en ética debe fomentarse desde la escuela de medicina. «Todos somos el problema y todos somos la solución», dijo. Subrayó que el paciente merece información clara y objetiva para evitar engaños.
Indicó que la falta de ética se encuentra tanto en el medio privado como en el público. «Si no te alcanza el presupuesto para dos tornillos en una institución pública, no hagas la cirugía», recomendó. Pidió a los pacientes aceptar solo cirugías necesarias, ya que «cada paciente es una razón».
Consultado sobre los recursos legales disponibles para los pacientes, confirmó que existen, pero advirtió: «Así como hay médicos que buscan sacar dinero, también hay abogados que lo hacen». Afirmó que los médicos también cuentan con defensa legal y recalcó que «la ética es un cálculo de conveniencia».
La conferencia se llevó a cabo ante los socios del Colegio Michoacano de Ortopedia y Traumatología, presidido por el doctor José Baltazar Torres, quien recientemente asistiera a la reunión nacional de la Federación Mexicana de Colegios de Ortopedia y Traumatología, encabezada por el doctor Augusto Álvarez Rengifo.