Por Sergio Lemus Calderón
El diputado federal de Morena, Carlos Torres Piña, cuenta con similitudes que llevaron a Andrés Manuel López Obrador a ganar la Presidencia de la República y a Mario Delgado a la presidencia nacional de Morena.
Con Mario Delgado se tiene un similitud de que a pesar de no ser militante de Morena ha venido cumpliendo con la aprobación de las reformas solicitadas y pedidas por el presidente de México, ya que los votos del oriundo de Paracho, municipio enclavado en la Meseta Purépecha, ha permitido que se sienten las bases de la 4T en el país.
Otra similitud es que cuentan con la misma imagen y estrategia de comunicación que llevó a Mario Delgado a la presidencia nacional de su partido, luego de que Torres Piña dejara la anterior consultoría o agencia. Hoy el resultado es que tiene un ritmo de crecimiento en las preferencias de la ciudadanía, para el cargo de gobernador pocas veces visto y que de ser un proceso interno que aparentemente se disputaba entre dos aspirantes, los resultados en las encuestas marcan que hay tres punteros empatados.
El mito que quisieron crear en el sentido que en la competencia sólo figuraban dos aspirantes, se ha roto y hoy Torres Piña se metió de lleno en la competencia, tras un trabajo efectivo.
Mario Delgado y Torres Piña son diputados que tienen mayor compromiso con la 4T, ya que no son personas de choque ni de diatriba contra adversarios o compañeros de partido, sino de diálogo, atención y de apoyo a grupos vulnerables.
Las similitudes con el presidente de México son que vienen de comunidades de escasos recursos, ambas de marginación y con raíces de los pueblos originarios de sus comunidades.
AMLO y Torres Piña están en contra de la corrupción y el despilfarro de recursos públicos para satisfacer intereses personales antes del pueblo de México y de Michoacán.
No toleran los excesos y defienden las luchas sociales de izquierda, ideología en la que han transitado en los últimos años.
