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Cada vez peor, el servicio de transporte público en La Piedad

La Piedad, Mich.- El servicio de transporte público en la ciudad enfrenta una grave crisis, afectando a miles de usuarios. Los microbuses que operan actualmente tienen hasta 40 años de servicio continuo, muchos en condiciones deplorables debido al escaso mantenimiento.

Además de la antigüedad de los vehículos, las rutas parecen no haberse actualizado con el crecimiento de la ciudad. Hay por lo menos 20 colonias y fraccionamientos creados en los últimos 15 años por donde no pasa ninguna ruta de microbuses.


«Vivo en Las Carmelitas y ningún camión pasa cerca», dice Guadalupe Esquivel. «Nosotros tenemos que tomar dos camiones y caminar varias cuadras para ir de la casa al CBTIS», señala Daniel Méndez que vive en la parte alta de la colonia Santa Fe.

Mientras que los habitantes de nuevos fraccionamientos como Ciudad del Sol, Laureles, Potrerillos, Vasco de Quiroga, Banquetes y Santa Fe, carecen de un servicio eficiente que les permita trasladarse con facilidad.

Como si esto fuera poco, se ha reducido el horario de operación de las pocas rutas disponibles. A partir de las 8 de la noche, ya no hay camiones que cubran zonas periféricas, lo que representa un reto para quienes tienen actividades laborales o escolares en horarios nocturnos.

«Antes, a las 10:15 de la noche salia el último camión de La Purisima a Ciudad del Sol. Ahora ya no hay servicio después de las 7:30 de la noche», señala Manuel Martínez.

En grupos de Facebook hay publicaciones de personas solicitando «rait» o pidiendo ayuda de transporte ya que sus hijos salen de la Univa o el Tecnológico a las 8 de la noche y no tienen forma de volver a sus casas.

Los ciudadanos demandan una pronta solución a estos problemas, pidiendo a las autoridades locales y a las empresas de transporte que inviertan en la modernización de las unidades, la ampliación de rutas, y la recuperación de un horario que cubra las necesidades de la población.

Esta situación no solo afecta la movilidad diaria de los habitantes de La Piedad, sino que también se ha convertido en un obstáculo para el desarrollo y la calidad de vida de la comunidad.