Agencias.- Una verdadera catástrofe es la que se registra en Turquía y Siria: el sismo registrado la mañana del domingo ha dejado un saldo de 1 mil 800 muertos y más de 13 mil 300 heridos.
Los informes recabados por agencias de noticias revelan que en Turquía son poco más de mil personas las que han fallecido y 5 mil 300 se encuentran lesionadas en hospitales o refugios.
Mientras que en Siria se registran 785 víctimas mortales y 7 mil 584 heridos, informaron diversas fuentes del gobierno de ese país.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró que unos 45 países han ofrecido ayuda después del devastador terremoto y las fuertes réplicas que aún continúan.
Confirmó que se han registrado derrumbes o daños graves en más de 2,800 viviendas y que se ha rescatado con vida a 2,470 personas de los escombros.
«Debido a que continúan las labores de desescombro en muchos edificios de la zona del terremoto, no sabemos a cuánto ascenderá el número de muertos y heridos», declaró Erdogan.
Las bajas temperaturas y la nieve en la zona, donde también hay territorios montañosos de difícil acceso, complican las tareas de rescate.
ENJAMBRE SÍSMICO
Durante la madrugada, el movimiento telúrico sacó de la cama a miles de personas. Los edificios comenzaron a caer en un radio de cientos de kilómetros que va desde el norte de Siria, desde ciudades como Alepo, hasta el sureste de Turquía.
El sismo se sintió también con fuerza en el Líbano, incluida Beirut.
La fuerza del terremoto la situó en 7.8 el Servicio Geológico de Estados Unidos, mientras que Afad lo establece en 7.7.
Horas después, otro temblor de 7.6 grados volvió a sacudir la zona, también con su epicentro en Kahramanmaras, a unos 80 kilómetros del primero.
Uno de los símbolos de la enorme destrucción del sismo es el histórico castillo romano de Gaziantep, que llevaba en pie más de 1,700 años y que ha sido arrasado por el temblor.
También ha sufrido daños la ciudadela histórica de Alepo, en Siria, Patrimonio de la Humanidad de la Unesco