Por Sergio Armando García Jiménez
“El ladrón vulgar te roba; el dinero, el reloj, la cadena, el móvil y el auto… El político te roba; La libertad, la salud, la vivienda, la educación, el futuro, la pensión, la diversión y el trabajo. La diferencia está en que el primer ladrón te elige a ti… Y al segundo lo eliges tú…”, autor desconocido
La inexplicable personalidad de AMLO:
Tengo 66 años de edad, me jacto de ser una persona que presume de descifrar la personalidad de las otras personas en base a sus miradas, sus gestos y a sus peculiares formas de actuar y ¿saben qué? casi siempre le atino a mis apreciaciones, si no en forma absoluta, sí percibo una gran parte de esas personalidades.
Recuerdo que antes para mí los temas políticos siempre fueron poco menos que importantes y hasta intrascendentes. Pero sucedió que un día viendo, por casualidad, “La mañanera” empecé a aficionarme a la misma, tal vez motivado porque se trataba nada más de escuchar los temas que ahí trataba el Presidente, mientras yo hacia mi trabajo cotidiano como director y propietario de mi despacho contable.
Recuerdo también que lo que me motivó a seguir viendo dicho programa fue un día el debate que tuvieron en el mismo un conocido e importante periodista mexicano-norteamericano de nombre Jorge Ramos, el cual le cuestionaba a AMLO que explicara porque seguía con su filosofía de “abrazos no balazos “ si sabía perfectamente que no estaba resultando positiva su estrategia de seguridad, ya que el país estaba siendo víctima de la delincuencia organizada tomando como base los números emanados de los datos que el propio gobierno publica y el tabasqueño le contestó: “Eso piensan ustedes los contrarios a nuestro movimiento, yo tengo otros datos”.
El buen Jorge sólo sonreía ante las ridículas explicaciones del presidente y finalmente optó por retirarse de tan peculiar programa, cuando el aspirante a dictador le dijo que él mejor se preocupara por el problema tan grave que tiene el vecino país con la situación del consumo del fentanilo que está provocando la muerte de 100,000 ciudadanos estadounidenses al año, entre jóvenes y adultos.
Si, amigo lector, de ese tamaño es el cinismo de nuestro mandatario federal. El velado mensaje al periodista fue “ustedes encárguense de arreglar sus problemas que nosotros nos encargamos de resolver los nuestros” y está bien, el problema es que nuestro país va, creo yo, “de mal en peor”.
López Obrador ha basado su actuar en la lucha de clases, ya no entre patrones y empleados, categorías que quedan cortas para la realidad mexicana sino entre “el pueblo bueno y sabio que lucha contra la oligarquía corrupta”; Para él, estar del lado del pueblo lo hace sentir virtuoso y aquel que no comulga con sus ideas siempre será perverso. Para él, un mismo acto se juzga distinto, dependiendo si se hace en favor del pueblo o de los poderosos. El clásico juego del bueno contra el malo.
Todos los días enfada, en su mañanera, tocando los mismos temas, como disco rayado, suelta insultos y amenazas, condena a medios no de comunicación, según él, sino de manipulación y a los periodistas los señala como corruptos y traidores y siempre aprovecha para quejarse del tiradero que le dejaron los anteriores “gobiernos corruptos”, no recordando que precisamente en su discurso, cuando era opositor, prometió que México, bajo su mandato, sería un país nuevo, libre de corruptelas y que justamente esa promesa fue lo que motivo a que millones de mexicanos le diéramos nuestra confianza en el proceso electoral del 2018 y bajo la afirmación de que “ Él iba a acabar con la corrupción” con su demagógico epíteto de “No robar, no mentir y no traicionar”.
Triste realidad, casi seis años después tenemos un país dividido con una polaridad nunca vista y el próximo 2 de junio, el pueblo, se habrá de manifestar en las urnas y muchos piensan, entre ellos yo, qué el sabio pueblo mexicano sabrá distinguir entre esos dos polos, la gente de escasos recursos simpatizantes de su política barata, a quienes aprovechándose de su ignorancia, los ha comprado en base a dádivas de dinero, concesiones y halagos y la otra parte del pueblo dígase clase media y alta.
Quienes están que se queman con la esperanza de que el pueblo despierte y vote por Xóchitl Gálvez con la ilusión de que nuestra nación vuelva a encontrar el redil perdido desde que la batuta la tomó, vuelvo a repetir, una persona como AMLO que de política sabe mucho, pero de administrador es un total cero a la izquierda. Ven los pobres en AMLO “El Mesias” que les dará el alimento que necesitan para subsistir en su vejez, es lógico entonces que voten por él cuando creen que es su salvador, los comprendo, pero no les doy la razón porque la oposición les ha repetido constantemente que los programas sociales permanecerán, caso específico el programa de los adultos mayores ($).
Es justo concluir que la fortaleza de AMLO se encuentra en los ciudadanos principalmente de las zonas marginadas y es lógico, porque ahí Morena juega con el hambre de las personas, recordando que Chiapas, Guerrero, Tabasco, Oaxaca e incluso algunas regiones de Michoacán, son los Estados más pobres de la República Mexicana. En las principales zonas metropolitanas del país AMLO está perdido.
¿Qué es lo que busca Andrés Manuel al seguir aferrándose a que una seguidora de él siga en el poder y le dé continuidad a la cuarta transformación?
AMLO sabe perfectamente que es importantísimo para su seguridad personal que uno de sus adeptos quede en el poder, caso contrario se le vendría una cacería de brujas. Ha ofendido a muchas personalidades importantes del país que solo están a la espera de que termine su mandato para echársele encima. No es fácil su situación. Él se lo ha buscado, le puede pasar lo que a muchos mandatarios que abusan del poder les ha sucedido. ¿Al final sus destinos son tristes, muy tristes, como todos los que han querido perpetuarse en el poder.
Lástima, debo reconocer que su personalidad daba para hacer un mejor gobierno; desgraciadamente no supo escoger adecuadamente a sus colaboradores. Con eso de que siempre expresó en el manejo de su ideología de que “Más vale honestidad que capacidad”. Nombró como colaboradores para transformar el país a puro cascajo viejo, personas de la vieja guardia, incondicionales que a todo le dicen “Sí Señor, lo que usted mande Señor”.
Mala decisión, en las cuestiones administrativas esa ecuación no funciona, la combinación de ambas cualidades, mencionadas en líneas atrás, sí. AMLO es un extraordinario político, pero también es un fabuloso mal administrador. Inversiones faraónicas sin posibilidad de que tengan un retorno en la inversión.
Para administrar hay que escoger a los mejores, a los más hábiles, a los más diestros, independientemente de su edad, si no los encuentro en mi movimiento partidista los encuentro en el ámbito profesional, pero hay que buscarle bien y despojarse de toda idea sentimental o de colores. Para disfrazar el desacierto que tuvo al nombrar a sus colaboradores que lo alentaron a hacer sus obras faraónicas al aventón, sin proyectos ejecutivos, el ciudadano presidente, en un momento dado, cuando vio que los gastos de inversión se le desfasaron se vio en la necesidad de no dar a conocer el monto invertido en esas obras, encasillándolas como inversiones de “Seguridad Nacional” para evitar así entregarle cuentas a todos los connacionales porque sabía perfectamente que a quienes les encargó la tarea de presupuestarlas y proyectarlas se les fueron las patas y
ahora se sabe que dichas obras han triplicado o cuadruplicado su presupuesto original y el presidente no se arriesgó, por ende, a exponerse al escrutinio público.
Quien tendrá razón, no le sé, pero es una posibilidad de que los mexicanos le cobremos la factura el domingo 2 de junio, quien sabe, ya lo veremos.
De entrada, que se vayan despidiendo del plan C, son muy pocas las posibilidades de que MORENA obtenga más del 66% de los votos, eso es un hecho., pero en fin, hay que esperar, ya sólo restan 38 días para las elecciones.
La verdadera realidad electoral del México actual:
México necesita ser un país de resultados; eso que dice AMLO, de que los propósitos legitiman el poder es al revés; más bien yo considero que son justamente los resultados los que lo legitiman.
Muchas gentes me han dicho que no quieren votar por el pasado, sobretodo, porque no quieren esos excesos, esos robos, esas manipulaciones y esos abusos en general.
Lo que es importante que sepa la población en general, es que fueron justamente los ciudadanos, con una recolección de un millón de firmas, los que impulsaron la candidatura de Xóchitl Gálvez y los Prianistas, quienes en ese entonces, estaban a la expectativa, buscando candidato, y les gustó Xóchitl y la hicieron propia. Entonces consecuentemente concluimos que fueron justamente los ciudadanos los que la hicieron candidata y el mensaje de un servidor a ellos es que ahora les toca a esos ciudadanos hacerla presidenta.
El Presidente de las ocurrencias:
Ahora resultó que el aspirante a dictador dice que va a aumentar las pensiones y quitarlas de las cuentas individualizadas que manejan las AFORES. Híjoles, 40 mil Millones de pesos es el nuevo botín les digo que no tienen llenadera estos prietitos.
Ya lograron pasar dos aduanas para que pase esa reforma constitucional, con la aprobación general de sus aliados de las cámaras de Diputados y del Senado, lógico porque tiene mayoría, pero en la Suprema Corte de Justicia de la Nación encontrarán la negativa a la misma, como ya ha sucedido con sus reformas risibles que han enviado anteriormente.
Otra jalada es la Ley de la amnistía, donde se habla de que el presidente puede dar el perdón a cualquier persona, aunque ya este juzgada y sentenciada. Caray, lo que nos faltaba, que el poder absoluto quedará en manos de un Presidente. Shi, como no ¿Y tú nieve de que la quieres.
Estamos en un momento en que la necesidad política de nuestro país es buscar CONCENSOS POLÍTICOS en la siguiente administración, en ésta los Morenos no ceden, quieren todo el pastel.
No se trata de diferir por diferir, yo soy enemigo de la polarización del país. Ya los políticos mexicanos tienen la necesidad de aprender a coincidir entre los partidos. Ya estamos hartos de que nuestro futuro esté en manos de puros abusivos que se enriquezcan a costa del erario público y aquí me estoy refiriendo
A TODOS LOS QUE OSTENTAN UN PUESTO INDEPENDIENTEMENTE DEL PARTIDO AL QUE
PERTENEZCAN. Ya hombre, ya estuvo bueno…
Las diferencias que se dan hay que ponerlas en la mesa, discutirlas y llegar a acuerdos en bien de todos, POR FAVOR…
Te hago una pregunta amigo lector ¿No crees que el gran problema de México es que pensamos más en el día de la elección, que en el día después de ella?
Gracias amigos y nos leemos semana a semana en esta su columna de opinión y a esperar el segundo debate del domingo que ya lo comentaremos a posteriori. Bye
