La Piedad, Mich. – Un paciente que logra su recuperación después de haber sido contagiado por Covid-19 puede llegar a tener una vida normal y adquiere inmunidad al mismo virus, además de que su organismo ya no puede contagiar a otro.
El problema pueden ser los daños que se cause a sus diferentes órganos, especialmente a los pulmones, durante el periodo de convalecencia, ya que puede sufrir procesos inflamatorios que dejan secuelas, similares a las que padece un paciente que tiene una Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), que es la que suelen presentar las personas que son fumadores crónicos o que son expuestos de manera prolongada a la inhalación de monóxido de carbono y diversas variedades de polvos.
La Redacción pudo platicar, de manera telefónica, con el especialista en Medicina Interna y Reumatología, Miguel Ángel Álvarez Guerrero, del Hospital General “Dr. Miguel Silva”, quien explicó que cuando una persona adquiere alguna infección por un virus nuevo, su organismo no tiene respuesta a ese virus, entonces viene un periodo de latencia (cuando el paciente no presenta síntomas de la enfermedad).
Luego de unos días, el paciente infectado (en este caso por coronavirus) comienza a sufrir fiebre, dolor de cuerpo, tos seca, irritación de garganta y falta de respiración. “Cuando, pasa todo esto viene la convalecencia y si el paciente tiene una respuesta inmunológica adecuada es cuando logra su recuperación”, explicó.
Para ese entonces, aquel enfermo ya produjo anticuerpos y al cabo de siete días ya su cuerpo es inmune al virus que lo contagió (en este caso coronavirus), por lo que una vez que se recupera ya no puede contagiar a nadie más.
“Ese tipo de personas pueden tener una vida normal, incluso su sistema inmune puede estar más fuerte que antes de enfermarse porque ya adquirió los anticuerpos necesarios. El plasma, que se obtiene de la sangre de estos pacientes, puede ser utilizado para la elaboración de vacunas, aunque ese es un proceso muy largo, porque requiere de muchos estudios”, añadió el especialista.
Comentó también que, en algunos estados del país, como es el caso de Nuevo León, se está utilizando el plasma de los pacientes recuperados para tratar algunas personas enfermas por Coronavirus.
“Esto apenas se encuentra en etapa experimental y no es garantía de que funcione para todas las personas, se tienen que hacer muchas pruebas y conocer las posibles reacciones que puede tener en cada persona”, apuntó.
Fue enfático en señalar que el problema que pueden tener los enfermos de coronavirus depende del daño pulmonar que hayan tenido durante la convalecencia, pues los pulmones quedan dañados. En casos de pacientes muy graves, se puede llegar al infarto cerebral y esto, desde luego que puede dejar secuelas.