Guadalajara, Jalisco.- El Arzobispo Emérito de Guadalajara, declaró que el la actual administración de la llamada cuarta transformación está guiando al país hacia un régimen comunista, según un documento titulado «El Comunismo que Viene» publicado en el semanario Arquidiocesano de Guadalajara, en su más reciente edición donde afirma que «Ante la pasividad de los católicos en nuestro país pretende implantarse esa ideología que debilita y empobrece a los pueblos con la finalidad de manejarlos».
En un contexto de sus declaraciones el Sandoval Íñiguez, escribió que a mital del siglo XX un Obispo de nombre Karol Wojtyla, comenzó a tocar el tema de la fraternidad, como alternativa del socialismo y capitalismo, que algunos intelectuales obispos adoptaron y desarrollaron llamándolo como solidaridad, bajo las premisas de la persona regida por la caridad, y que el dinero o la riqueza es un medio y no un fin. Hablando de «economía social de mercado o capitalismo social. El Papa Francisco lo llama: Economía con rostro humano».
Por otro lado dice que el «Comunismo y Socialismo es prácticamente lo mismo, la diferencia es que el comunismo es mas sangriento, mas violento, mientras que el socialismo es más ideológico».
Afirma además en su texto que el gobierno actual conduce al país a un régimen de características, que va numerando y desglosando a manera de argumento en su hipótesis, comenzando por el ateísmo basado en la doctrina materialista de Marx y Engels en el Manifiesto del Partido Comunista, que dicta la doctrina de un Dios inexistente, existe solo la materia y esta va evolucionando, produciendo y determinando todas las cosas.
En un segundo punto resalta que la Nación es la única dueña de todos los bienes, apropiándose de las propiedades para repartir «justamente los bienes materiales que son causa de los males y problemas sociales.
También resalta un régimen dictatorial en el que el estado controla las ideas y la educación. Todo quiere que le pertenezca, destruyendo instituciones democráticas y si no se destruyen se dejan como parapeto para controlarlas.
El cuarto punto señala que el gobierno actual está «En contra de la familia y de la vida, a través de la promoción de la ideología de género que es una aberración de las más grandes y más absurda que busca deshacer la identidad de la familia y de la persona».
En su texto el Arzobispo continúa «¿Cuál es la finalidad? Dominar para que se establezca un nuevo orden mundial, para que, una vez, debilitados y empobrecidos los pueblos, acabada la personalidad de los ciudadanos se puedan manejar fácilmente.
Esa es la realidad que se aproxima para México, con la pasividad nuestra porque no captamos la gravedad del problema»
Por último afirma que esto ya ocurrió en países como Cuba, China, Venezuela, Nicaragua y se ha intentado hacer en Brasil, Argentína Bolivia y Chile y ahora se pretende hacer en nuestro país «queriendo implantar el comunismo».
