Morelia, Mich
.- El Gobierno del Estado ha dispuesto todo lo necesario para garantizar atención médica a las y los michoacanos en casos de contagio de COVID-19, afirmó el Gobernador, Silvano Aureoles Conejo.
“Nuestro compromiso es salvar la mayor cantidad de vidas posibles; fuimos de las primeras entidades en cancelar todas las actividades no esenciales, así como todas las actividades que pusieran en riesgo a las y los michoacanos como las clases presenciales”, recordó.
En el marco de una reunión virtual con integrantes del Colectivo Michoacán Humanitario, el mandatario estatal recalcó el trabajo que se ha hecho en los últimos cinco años, para la recomposición del sistema de salud, lo que ha permitido encausar de mejor manera la pandemia en Michoacán.
“Estoy convencido que ese trabajo evitó que la historia del COVID-19 en Michoacán hubiera sido una catástrofe”, recalcó.
Dentro del trabajo que se desarrolló en Michoacán, también está la creación del Centro de Inteligencia en Salud, el CIS, ponderó Aureoles Conejo.
“Es único a nivel nacional y nos permite prepararnos para atender de manera temprana y eficiente a quien lo requiere”, precisó.
Ante los asistentes, el gobernador destacó la coordinación estrecha con las y los presidentes municipales del estado a través de 108 Comités Municipales de Salud con acciones para enfrentar la contingencia. Además de las decisiones que se toman dentro del Comité Estatal de Seguridad en Salud.
Silvano Aureoles destacó la participación de elementos de la Policía Michoacán, pero también de los Guardianes de la Salud quienes se han puesto al servicio de la ciudadanía en las medidas de contención de la emergencia.
Otra de las prioridades del Gobierno del Estado, expuso el gobernador, ha sido mejorar las condiciones de los trabajadores del sector salud, quienes han dado la batalla en primera fila contra la pandemia, para ello se ha dotado al personal de los centros de salud y de hospitales con equipo de protección y uniformes.
Además de la homologación salarial de mil 500 trabajadores, lo que equivalió a un incremento salarial del 60 por ciento.
