Morelia, Mich.- Ese día Kassandra se levantó temprano, se arregló y salió no sin antes despedirse de su marido. Este le deseo éxito en la negociación que pretendía hacer. Y es que un día antes, una mujer que dijo llamarse Leoveldina la contactó mostrándose interesada en el carro que ofrecía en venta.
Las mujeres hablaron por teléfono y pactaron una cita para ver el vehículo y cerrar el trato.
Era el 2 de marzo del año 2019, cuando ambas se reunieron en una de las calles de Morelia. Cuando estaban dialogando sobre el precio y las condiciones de la unidad llegaron tres sujetos, iban armados. Eran José Fabián D., Javier I. y Gibran Artemio C., quienes obligaron a Kassandra a subir a una camioneta, le vendaron los ojos y la privaron de la libertad.
Kassandra se dio cuenta de que había sido engañada. Cayó en la trampa. Leoveldina era parte de este grupo delictivo cuyos miembros abusaron de ella durante el tiempo que estuvo en cautiverio.
Juan Luis, el esposo de Kassandra, fue el encargado de negociar el rescate. También estaba coludido.
El plagio fue denunciado ante la Unidad Especializada de Combate al Secuestro (UECS), que luego de llevar a cabo las actuaciones correspondientes, ubicó a la mujer en un hotel del municipio de Zitácuaro, de donde fue liberada. Ahí también fueron detenidos los responsables.
Los cuatro hombres y la mujer fueron llevados a juicio, y una vez que finalizó el desfile probatorio, un Tribunal de Enjuiciamiento los encontró culpables y sentenció a Juan Luis S., a 72 años de prisión, mientras que Javier I. le impuso una pena de 68 años y a José Fabián D., Gibran Artemio C. y Leoveldina Yolotzin C., los sentenció a 60 años de prisión, así como al pago de la reparación del daño.
Los culpables prácticamente pasarán el resto de su vida tras las rejas de una prisión. Pero la agresión de que Kassandra fue objeto también quedará grabada en su memoria para siempre.
