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PELIGRA NUESTRO DERECHO A SABER

Por: Rafael Ayala Villalobos

Lector, lectora queridos, les platico que cuando Paty cumplió 62 años empezó a averiguar sobre su pensión. Se fue de espaldas: le informaron que le faltaba mucho; no le reconocían 11 años laborados y disponía de pocas pruebas para demostrar que sí los había trabajado. En donde los laboró no le querían dar documentación y en el IMSS, aparte de tratarla mal y traerla a las vueltas de aquí para allá, de oficina en oficina, haciendo largas filas, no le ayudaban. Paty había enviudado tres años atrás, vivía sola en La Piedad, estaba cansada y deprimida, quería irse a Álamo, Nevada, en los Estados Unidos donde vive su hija, quien le insistía en que ya se fuera.


Por un anuncio televisivo tuvo la idea de acudir anca el Instituto Nacional de Acceso a la Información, el INAI. Fue a parar a su Delegación en Morelia, en Paseo de la República 571, colonia Félix Ireta. “Bueno, primero llamé a su teléfono, el 44 33 12 38 06. Ahí se portaron muy amables –dice Paty sonriendo-, tienen personal capacitado, todo es gratuito, allí mesmo me asesoraron, metimos solicitudes reclamando mi información laboral en las dos dependencias en las que trabajé y, como los funcionarios están obligados por ley a entregarla, tuvieron que aplicarse en conseguirla, de pronto apareció un expediente perdido y antes del plazo legal, teníamos todo. Con eso ellos me ayudaron ante el IMSS al trámite y logramos recuperar 10 años de cotizaciones y ya tenemos andando el trámite del que nos falta. Estoy feliz”.

Como esta historia hay muchas. El INAI es la materialización de la lucha que inició el Partido de la Revolución Democrática –el mismo que anda perdiendo su registro- y a la que se sumaron muchísimas organizaciones de la sociedad civil y a la postre otros partidos. La lucha fue por hacer realidad el derecho humano a saber. La ciudadanía tiene el derecho a conocer lo público, contimás si le atañe en lo personal. Asimismo, el INAI se encarga de proteger los datos personales.

Hace 22 años, luego de una larga lucha social, en la que participé con mi granito de arena, que incluyó marchas y mítines por avanzar en la transparencia, se hizo real el derecho a saber en México.

Pero como a veces cae un pelo en la sopa, equivocadamente el presidente López quiere eliminar a los organismos autónomos constitucionales, sin considerar alguna valoración sobre para qué sirven, tampoco sin un diagnóstico claro de su desempeño, sin tomar en cuenta que defender los organismos autónomos es cuidar lo público.

Estos organismos hacen funciones del poder ejecutivo, colaboran en neutralizar a los poderes judicial y legislativo y han resultado indispensables para que exista un equilibrio entre los poderes y entre el gobierno y entre el Estado y los ciudadanos.

Así es como contribuyen a garantizar los derechos de la gente y a consolidar la democracia en el país.

También garantizan los derechos de las personas, regulan actividades privadas y entre el sector público y el privado.

En cierto sentido son un dique de contención a las arbitrariedades del poder, en su caso, en perjuicio de la sociedad.

Eliminarlos es desarmar a la sociedad frente a un gobierno que, para el colmo, hoy busca tener y concentrar más y más poder.

Los organismos autónomos constitucionales son varios, entre los más conocidos están el Banco de México que cuida el poder adquisitivo de la moneda, entre otras cosas; el Instituto Nacional de Geografía y Estadística; el Instituto Nacional Electoral; el Instituto Nacional de Acceso a la Información; el Instituto Federal de Telecomunicaciones; la Comisión Reguladora de Energía; y la Comisión Nacional de Hidrocarburos.

A veces no sabemos para qué diantres nos sirve el INAI. Pero basta con recordar que muchos casos de corrupción gubernamental se han descubierto gracias a solicitudes de información hechas por ciudadanos, organizaciones y periodistas.

El INAI sirve para solucionar problemas de la vida cotidiana de la gente que necesita determinada información que está en manos del gobierno, como historial o antigüedad laboral, semanas cotizadas, resolución de trámite de pensión, pues como sabemos, toda persona que trabaja cierto tiempo tiene derecho a pensionarse justamente.

Lamentablemente existen innumerables casos en que la información no quedó bien registrada, alguien extravió algún documento, un funcionario no realizó algún trámite, etcétera, todo ello en perjuicio de quien aspira a pensionarse.

Lo malo es que es dificilísimo que las dependencias le entreguen la información a cualquier cristiano. Actúan como juez y parte y los funcionarios y trabajadores a veces se tapan unos a otros con insensibilidad asombrosa. Para eso está el INAI: para exigirlo conforme a la ley, so pena de aplicar diversas sanciones en contra de quienes la retienen o cometieron negligencia.

Y no solo el INAI tiene que ver con el IMSS, también con el ISSSTE, donde cometen cada barbaridad…, y con cualquier dependencia del gobierno.

El Instituto Nacional de Acceso a la Información, INAI, cuenta con un Centro de Atención a la Sociedad (CAS) que tiene una alta productividad en asesorías realizadas en materia de semanas cotizadas, historia laboral y resoluciones de pensión, pues es muy frecuente que los ciudadanos vean dificultado el ejercer el derecho humano que tienen a alcanzar pensión.

Cuando el INAI fue parado en seco en sus funciones, porque el presidente López Obrador, manipuló al Senado con el objeto de que no cubriera las vacantes que tenía el órgano directivo del INAI, durante mucho tiempo nadie podía solicitar nada, o solicitaban pero no se les daba curso; todo se detuvo, mucha gente salió perjudicada, hasta que la Suprema Corte de Justicia, autorizó al INAI a sesionar con los miembros que tenía, validando de antemano las resoluciones que emitiera, habida cuenta de que no era su culpa, sino del senado por su negligencia.

Actualmente Morena quiere desaparecer a los organismos autónomos, incluyendo al INAI, alegando una corrupción que nunca demuestra ni castiga, pero que le sirve para su pirotecnia discursiva, con la antidemocrática intención de debilitar a la sociedad civil, esto es al pueblo, frente al Estado.

Morena quiere que no haya transparencia –ha sido un gobierno opaco y corrupto-, que el ciudadano no conozca los detalles de, por ejemplo, una obra pública, lo que abona a la corrupción y a la impunidad, pero que de paso también lesiona el derecho humano a saber, hoy garantizado jurídicamente por convenciones internacionales, dejando a los ciudadanos, muchas veces en estado de indefensión, porque las dependencias tienen, retienen, distorsionan y niegan información, como era antes de que hubiera INAI que con su trabajo hace posible en la realidad que muchas mujeres y hombres tengan acceso a la justicia y a la educación, a la salud y a la educación y a muchos otros apoyos de seguridad social.

Bueno es que nos concienticemos sobre lo que es el INAI –y los organismos autónomos-, para qué nos sirve y porqué conviene movilizarnos para defenderlo, a fin de que siga existiendo, al igual que otros muchos organismos autónomos.

– ¿Autónomos respecto de qué? –preguntará alguien-.

– Del gobierno, para que este no sea juez y parte.

– ¿Para qué quieren ser autónomos?

– La autonomía de estos organismos no es para hacer lo que quieran, como los ha acusado el presidente, sino para tener la libertad de hacer lo que los ordenamientos jurídicos le obligan, lo cual les ayuda a actuar sin criterios político-electorales o partidistas, en beneficio de la sociedad.

La izquierda, o es democrática o no lo es.

La democracia no es sólo votar, división de poderes y ciertas libertades.

Democracia implica establecer límites al Estado y a las funciones del gobierno y no la concentración del poder.

Democracia implica, también, el empoderamiento del ciudadano frente al gobierno y el Estado.

Quien no sigue estos principios no es de izquierda.

Por eso Morena no es demócrata ni de izquierda.

En vez de eso es una autocracia populista.

Así pues, muchos votantes favorecieron el 2 de junio a Morena, tal vez sin detenerse un poco a pensar en la ruta que Morena sigue para entronizar una dictadura en México.

Actuaron como si una gallina ayudara a sacarle filo al cuchillo con el que la van a despescuezar.

Sean felices.