La Piedad, Michoacán.- A pesar de que desde hace un par de años se activó un programa federal para rescatar comunidades rurales que se encuentren con cierto nivel de dificultad para salir adelante, el proyecto «Sembrando Vida» no ha podido aterrizar en la totalidad de zonas rurales donde los productores del campo se dicen olvidados, dejando de lado a muchas de las regiones del país. En Michoacán, solo algunas regiones han sido consideradas para este programa.
«Sembrando Vida» tiene el objetivo de impulsar al campo y a sus productores, coordinado por la Secretaría de Bienestar, otorgando apoyos para la reconstrucción del tejido social en las zonas agrícolas que más lo necesitan, cubriendo 20 de los 32 estados de la república.
En Michoacán, los municipios en los que se aplica este proyecto son Morelia, Cherán, Paracho, Nahuatzen, Uruapan, Huetamo, San Lucas, Múgica, Gabriel Zamora, Tzitzio, Carácuaro, Nocupétaro, Tiquicheo, Tingambato y Turicato, ofreciendo a 9 mil 851 sembradores apoyo económico y en especie, así como acompañamiento técnico, pero no se han logrado los resultados esperados.
Ante ello el dirctor de Fomento Agropecuario de La Piedad, Fernando Rosales, dijo estar preparados con los productores del sector agrícola para que cuando se llegue el momento estén listos para poder aportar su granito de arena en el municipio, afirando que estarán contentos de poder trabajar este proyecto que considera árboles frutales y árboles maderables.
En ese sentido para el director de la dependencia se ha buscado que el proyecto “Sembrando Vida” pueda ser incluido en más espacios, beneficiando a los productores con alternativas de cultivo, invitándolos con ello, a eliminar la práctica de quema de esquilmos, ya que este tipo de actividad los deja fuera del programa.
Comentó que el tema fuerte es que se «tienen ya muchas enfermedades hoy en día en los diferentes suelos de Michoacán, eso también perjudica mucho, no se si te ha tocado ir hacia el rumbo de Uruapan que una buena región se está secando por diferentes enfermedades»
Por su parte Salvador Zárate, dijo que la falta de resultados en el programa para los campesinos, puede atribuirse a la generación de un proyecto que no fue probado antes de ponerse en marcha, por lo que se ha manejado experimentando con prueba y error, sin tomar en cuenta que cada una de las entidades involucradas cuenta con microclimas, que en muchos de los casos no son similares, lo que provoca que los planes que aplican para un lugar, deben ser por completo diferentes para otro.
Advirtió que cuando un vaporizas un programa como Sembrado Vida y lo pones a querer funcionar sin la debida preparación, estructuración y pruebas, no genera los resultados esperados en el territorio, por la diversidad con que se cuenta y es que por lo regular los programas que se generan desde una escritorio de forma centralizada no tienen un periodo de prueba.
Enfatizó que es necesario que las autoridades de todos los niveles de gobierno, tengan acercamientos con los productores de campo y conozcan sus necesidades, privilegiando los recursos naturales, pues existen espacios en los que la sequía provoca que los cultivos no se logren.
Piden la intervención de los delegados de bienestar para que trabajen en la apertura de espacios, para que más productores se sumen a este programa y no enfocar todas las baterías en aplicar vacunas anticovid, descuidando el resto de programas.