Apatzingán, Micoacán.- La Diócesis de Apatzingán, suspendió de forma indefinida al sacerdote católico Gregorio López Gerónimo, de sus actividades eclesiales, por que lo ahora está impedido de realizar cualquier actividad religiosa.
Eta suspensión se da, después de que se comprobó que el incumplimiento de las leyes eclesiásticas, al ofrecer y oficiar sacramentos a presuntos delincuentes.
La Diócesis de Apatzingán, anunció el cese por lo que denominaron faltas graves a la administración de los sacramentos, posteriormente esta información fue confirmada por el propio Gregorio López, en un mensaje de WhatsApp en el que señala que, con él, ya son 10 los sacerdotes suspendidos en esta Diócesis.
A través de un comunicado la propia Diócesis, menciona que: «Como Obispo de esta Diócesis de Apatzingán, el CIC me señala el deber de: ‘Dado que tiene la obligación de defender la unidad de la iglesia universal, el obispo debe promover la disciplina que es común a toda iglesia y por tanto exigir el cumplimiento de todas las leyes eclesiásticas'».
La misiva también refiere que se ha de vigilar para que no se introduzcan abusos en la disciplina eclesiástica, especialmente acerca del ministerio de la palabra y la celebración de los sacramentos y sacramentales, así como en el culto de Dios y de los santos y la administración de los bienes.
Enfatiza además que se deben: «Cuidar que las funciones sagradas se celebran en las iglesias o en los lugares propios para la celebración misma, de acuerdo con las normas litúrgicas, lo cual exige bastante más que la simple vigilancia para evitar abusos».
Añade que: «Por ello que les comunicó con dolor y pena, que el presbítero Gregorio López Gerónimo, ha sido suspendido de manera indefinida en el ejercicio ordinario de la potestad del orden. A partir de hoy, de ahora en adelante no podrá celebrar ningún Sacramento, ni acto que tenga que ver con la investidura eclesiástica».
Al final el Obispo de Apatzingán, Cristobal Ascencio García, reconoció el bien que ha hecho, por lo que subrayó que:» el motivo de la suspensión del padre Gregorio, es por las faltas repetidas y graves dentro y fuera de las diócesis, en la administración de los sacramentos, faltas graves que han ocasionado serios problemas en la comunidad eclesial y que también han sido faltas a la dignidad de los sacramentos.:
A pesar de ello personal de la Arquidiócesis de Morelia, refieren que el «Padre Goyo» fue varias veces sorprendido administrando los sacramentos a miembros del crimen organizado y sus familiares, sin respeto de las normas litúrgicas.
Por su parte el sacerdote ahora suspendido, afirmó que «No hay pedo» y seguirá con sus labores sociales, empeñado de corazón en la periferia de la iglesia, para buscar descartados sociales, esperando no cometer ninguna falta canónica contra la caridad.
Cabe señalar que los sacerdotes que han sido suspendidos enfrentan ahora procesos judiciales por diferentes delitos, entre ellos, la pederastia.