El devastador doble azote de los ciclones Lidia y Max ha dejado un rastro de destrucción en varias regiones de México, con un trágico saldo de cinco víctimas mortales confirmadas hasta el momento. Este miércoles, dos personas perdieron la vida en el estado de Jalisco, elevando la cifra total de fallecidos.
En un triste incidente, una persona murió al intentar cruzar un río en el municipio de Pihuamo, según lo informó el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, a través de sus redes sociales. El Ejército también reportó la muerte de otra persona por un ataque al corazón en Autlán, que se produjo tras la evacuación del hospital regional debido a inundaciones causadas por las intensas lluvias.
El ciclón Lidia, que tocó tierra en México como huracán de categoría 4 el martes, se degradó a baja presión remanente el miércoles. A pesar de su potencial devastador, el mandatario estatal expresó su alivio al informar que la mayoría de los municipios afectados en Jalisco sufrieron daños menores, como la caída de árboles, techos dañados y casas inundadas.
La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, anunció previamente la muerte de un hombre en Nayarit, a causa de la caída de un árbol en Bahía de Banderas.
Estas víctimas se suman a las dos muertes relacionadas con el ciclón Max, que se debilitó después de tocar tierra como tormenta tropical en Guerrero el lunes. En Guerrero, una persona murió al caer en un socavón en la carretera Acapulco-Zihuatanejo, y otro hombre perdió la vida al ser arrastrado por la corriente en el municipio de Técpan.
Ante la magnitud de los estragos causados por Lidia y Max, se ha desplegado un impresionante esfuerzo de respuesta y rescate, que incluye a más de 32,000 elementos de las Fuerzas Armadas, 741 vehículos, cuatro cocinas comunitarias, nueve aeronaves, 13 embarcaciones y 403 equipos especializados para ayudar a las comunidades afectadas en su recuperación. Las autoridades continúan evaluando los daños y brindando apoyo a las áreas afectadas por los ciclones.
